Finalizó el Open de Roquetas, pero no nos quedamos satisfechos y se aprovecharon dos días más para seguir practicando ajedrez. En estos dos días contamos con la colaboración de dos Maestros Internacionales: el argentino Marcelo Panelo y el español de origen peruano Arturo Vidarte.
Marcelo nos dedicó todo un día con enseñanzas muy prácticas. Por la mañana mantuvo una distendida clase con los mejores niños de Almería, de los que destacó su gran saber estar y sus ganas de seguir aprendiendo "me ha impresionado que tras tres horas sigan queriendo más sin cansarse lo más mínimo" éstas fueron las palabras del titulado, esperemos que pudiesen aprovechar bien esas horas. Ya por la tarde, les tocó el turno a los "mayores" que también pudieron disfrutar de la forma de entender el ajedrez de un Maestro de este nivel. Sin duda, Marcelo Panelo tiene una gran capacidad didáctica que ayuda a que podamos entender bien lo que explica.
Al día siguiente, nos tocó jugar una simultánea ante Arturo Vidarte. Si el día anterior tocó la teoría, esa mañana tocó la práctica, algo que deben ir unidas para la mejora de este deporte.
Arturo portó piezas blancas en cada una de las 20 partidas que disputó. Niveles diferentes entres sus adversarios, pero Arturo no miraba más allá del tablero, sin importar quién fuese su adversario. Pronosticábamos que pronto se decidirían muchas partidas, pero sin embargo, todos presentaron árdua batalla, algo que volvió a sorprender a los titulados que consideraron de un gran nivel el ajedrez de nuestra provincia. Sin embargo, Arturo tomaba ventaja en todas las partidas, excepto en la del pequeño David Cabrera, que aprovechó un descuido de Vidarte para hacerle una pequeña celadita y cazó a su dama. Arturo tuvo que remar mucho en esa partida, pero la complicación de la posición, el buen juego de David y la presión del resto de partidas hicieron que esa fuese la única partida en la que tuvo que declinar el rey. Así algunos titularon que "el pequeño David, venció a Goliat (en este caso, al rey Arturo)". Esa fue la única derrota, pero no la única dónde no logró vencer, ya que Antonio Vico, tras plantear una seria partida, cerró toda la posición e hizo imposible seguir avanzando llegando a una posición de tablas que Vidarte aceptó. Y la otra partida que acabó en tablas, fue la de Javi Garrido, que pasó en varios momentos de estar mejor a peor y viceversa, llegando a un final complejo dónde el roquetero decidió dar continuo por no existir mejor continuación.
Sin duda, bonitos días de ajedrez, que complementan los 4 días vividos intensamente en el XXII Open Internacional de Roquetas y que sin duda es una gran experiencia para todos los roqueteros y almerienses. El año que viene más y esperemos que incluso mejor.